El Presidente de Corea del Sur Declara la Ley Marcial de Emergencia Ante la Crisis Política

Seúl, Corea del Sur – El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró el martes la ley marcial de emergencia, suspendiendo “todas las actividades políticas” en respuesta al estancamiento político que ha obstaculizado su gobierno. Esta decisión marcó una escalada significativa en la confrontación entre el presidente Yoon y la Asamblea Nacional, controlada por la oposición.

Aunque no se aclararon todos los detalles de lo que implica la ley marcial, el anuncio otorgó al presidente la autoridad para controlar los medios de comunicación. Esta medida sin precedentes desató protestas frente a la Asamblea Nacional, donde los manifestantes se enfrentaron con la policía. Los legisladores de la oposición pidieron rápidamente la derogación del decreto, que representa la primera vez que un presidente surcoreano declara la ley marcial desde el fin de la dictadura militar en la década de 1980.

Yoon, quien enfrenta una gran impopularidad, acusó a la oposición de conspirar para socavar la democracia de Corea del Sur. En un discurso televisado, condenó a la oposición por utilizar su mayoría en la Asamblea Nacional para destituir a miembros de su gabinete y bloquear políticas clave del gobierno, lo que, según él, había paralizado su administración.

La Asamblea Nacional, en una reunión de emergencia celebrada la noche del martes, aprobó una resolución exigiendo el levantamiento inmediato de la ley marcial, citando la obligación constitucional del presidente de cumplir con la solicitud de la Asamblea.

Se produjeron protestas en Seúl cuando los manifestantes intentaron ingresar a la Asamblea Nacional, coreando “¡Fin de la ley marcial!” Por su parte, el líder de la oposición, Lee Jae-myung, rechazó las acciones de Yoon, calificando la declaración de ley marcial de ilegal y prometiendo resistir el dominio militar en el país.

Bajo la ley marcial, el General del Ejército Park An-soo fue nombrado para hacer cumplir las medidas, que incluyen la prohibición de todas las actividades políticas, manifestaciones y actividades laborales. El presidente también obtuvo el poder de controlar los medios de comunicación, con un decreto que advierte que quienes difundan “noticias falsas” podrían ser arrestados sin una orden judicial.

Incluso miembros del propio partido de Yoon expresaron críticas. Han Dong-hoon, líder del Partido Poder Popular, describió la declaración de la ley marcial como un error y se comprometió a trabajar con los ciudadanos para revertirla.

La crisis sin precedentes en la política de Corea del Sur sigue desarrollándose, lo que genera preocupación sobre el equilibrio de poder y el futuro de la democracia en el país.